Entrevista a Mercedes del Río Merino

Es difícil no hablar en estos momentos de la grave situación que estamos viviendo a nivel mundial y su repercusión en todos los ámbitos. En este sentido,

¿Cómo se vive como máxima responsable de una entidad como es la Escuela Universitaria de Arquitectura Técnica de la UPM, estos delicados momentos?

Se viven con una cierta tensión y también desazón. Hace poco más de cuatro años, nuestros alumnos tenían trabajo cuando comenzaban los dos últimos cursos. En estos momentos, las empresas del sector no sólo no están demandando nuestros egresados sino que en muchos casos los están despidiendo. Todo esto genera entre nuestros alumnos un clima de gran desmotivación.

¿Desde su posición dentro del órgano de dirección de la Escuela y como profesora que está día a día con los alumnos, ha detectado entre los jóvenes una inquietud o desaliento que se traduzca en menos alumnos matriculados y menos ilusión ante su futura profesión?

Como he comentado en la pregunta anterior, nuestros alumnos están mucho más desmotivados que hace unos años. A pesar de ello, seguimos siendo de las Escuelas que tienen una mayor demanda en nuestra Universidad. A pesar de ello, seguimos buscando nuevas formas que hagan más atractiva la enseñanza, y que mejoren la empleabilidad de nuestros egresados. Hemos ido incorporando de forma paulatina, formación en competencias y habilidades como el trabajo en grupo, la comunicación, la inteligencia emocional, el inglés, etc….este tipo de formación más transversal, junto con las prácticas en empresa, el fomento de la movilidad internacional, así como la organización de numerosos seminarios y conferencias impartidas por profesionales y empresas del sector, permite complementar la formación más técnica y teórica de nuestros alumnos, lo que conseguirá mejorar sus perspectivas en el mundo profesional.

A nivel docente, ¿Se enfocan los contenidos a la difícil situación por la que seguramente tendrán que pasar los alumnos que han iniciado la carrera en los últimos años?

Los contenidos del título de grado siguen siendo generalistas, al igual que en su día lo fueron los contenidos del título de Arquitectura Técnica. No obstante, estamos mejorando la especialización en diversos campos de la Edificación, a través de los programas de Masteres Universitarios y de título propio, y también a través de los cursos de especialización que impartimos en la Escuela. Estos últimos años, se ha hecho un gran esfuerzo en mejorar nuestra oferta formativa pretendiendo la mejoran de los conocimientos de los graduados en el ámbito de la edificación en cuestiones novedosas y actuales como la eficiencia energética, la innovación tecnológica, la gestión de los residuos, la gestión de la edificación, etc. De esta manera, mejoramos las posibilidades de empleo de nuestros egresados y damos respuesta a las nuevas necesidades de la sociedad.

La arquitectura es, sin duda, una profesión muy entroncada con el arte. ¿Cree que se perderá ese matiz, dadas las limitaciones económicas, o, por el contrario se desarrollará más la imaginación y surgirán proyectos más singulares?

Creo que la historia demuestra que es en los momentos de mayores problemas, de crisis económica fundamentalmente, cuando surgen las mejores ideas. Por tanto no sólo pienso que estos tiempos conseguirán ordenar el sector si no que saldremos mucho más reforzados.

¿Influyen a la hora de impartir el conocimiento las modas y tendencias?

Que duda cabe que hasta cierto punto si. Lo que pasa es que el sector de la edificación es bastante conservador, y por tanto no suele seguir las modas. Lógicamente, cuando se tiene que impartir cualquier tema los profesores solemos documentarnos o hablar de nuestra propia experiencia más reciente. De esta forma conseguimos mejorar la motivación de los estudiantes. Por ejemplo al poco tiempo de aparecer el video de youtube sobre el rascacielos construido en china en quince días, ha empezado a surgir un “movimiento” reivindicativo de los sistemas prefabricados, o por ejemplo todo el “movimiento” organizado en torno a los  productos ecológicos, que ha dado lugar a la aparición en el mercado de la construcción de edificios a los eco-materiales; eco-productos; eco-estructuras, etc.

Conocemos su interés por acercar la Universidad al mundo empresarial, ¿Qué aspecto de este acercamiento considera más importante para sus alumnos?

Creo de verdadero interés para mis alumnos, el contacto con el mundo empresarial a través de conferencias, seminarios, ferias de construcción, congresos, etc, pues eso les permitirá estar al día y actualizar sus conocimientos tanto sobre los materiales y productos para la construcción, como sobre los nuevos sistemas y procedimientos para la ejecución de edificios.

Sabemos que los recursos a veces son escasos, pero pensamos que la innovación es uno de los caminos para mejorar el crecimiento. ¿Comparte usted esta opinión y, si es así, como se lleva a cabo la innovación dentro del ámbito universitario?

Estoy totalmente de acuerdo. Para poder innovar es primero necesario conocer en profundidad la materia en la que se pretende incorporar los cambios, las mejoras. Por tanto para mi es fundamental que la Universidad sea promotora de la Innovación y sea capaz de trasladar a los estudiantes esta vocación que nace de la mejora del conocimiento. Nuestra Escuela impulsa a lo largo del curso actividades que tienen como objetivo introducir a los estudiantes en esta cuestión. A los alumnos de grado les proponemos retos, concursos e incluso les damos algunos seminarios sobre creatividad. A los alumnos de postgrado se lo exigimos como elemento de partida para la realización de sus trabajos fines de Master.

En cuanto a la innovación, podemos decir que los materiales cerámicos se están adecuando a las exigencias de normativa como en alcanzar mejores prestaciones y resultados estéticos. ¿Cómo valora usted esta evolución?

Valoro esta evolución de forma muy positiva. Creo que es un sector que ha sabido aunar esfuerzos de una manera muy inteligente y eso le está llevando a ser pionero en la innovación de productos para dar respuesta a las nuevas necesidades de la sociedad. Sirva de ejemplo la rápida respuesta del sector a las exigencias del Código Técnico de la Edificación.

Como sabe el Código Técnico de la Edificación, está obligando a la mejora en la calidad de la construcción, tanto a la hora de proyectar como en la ejecución, todo ello enfocado a un mayor bienestar del usuario final.  Como sabe Hispalyt siguiendo estas pautas de calidad,  ha desarrollado diferentes publicaciones técnicas enfocadas a las buenas prácticas en obra. Entre ellas destaca el Manual de Ejecución de Fabricas para Revestir, en el que hemos tenido la satisfacción de poder contar con la participación de la Escuela, y contar en el con un prólogo de su autoría, que aprovechamos para agradecerle muy especialmente.

¿Cómo valora, desde su perspectiva docente, este tipo de publicaciones que intentan acercar a todos los agentes que participan en la obra, lo necesario de una correcta ejecución y conocimiento de los materiales?

Para la Escuela y para mi, personalmente, ha sido una satisfacción colaborar con Hispalyt,  pues valoro iniciativas como la edición del Manual de Ejecución de Fabricas para Revestir de forma muy positiva. Creo que sólo considerando los distintos puntos de vista de los agentes implicados en una tarea, se puede solucionar una cuestión en su aspecto más global. Cuando un estudiante me plantea la realización de un trabajo que pretende la solución de un determinado problema, lo primero que le indico es la necesidad de observar y analizar dicho problema a través de todos los implicados en él, esa será la única manera de resolverlo realmente.

¿Cómo se traslada esta exigencia a los alumnos como futuros Arquitectos técnicos?

Nuestros alumnos saben, desde el primer curso, que los Arquitectos Técnicos deben tener conocimiento de muchas cuestiones del ámbito de la edificación y ser unos expertos en materiales y procesos constructivos. En ese sentido, todas las publicaciones que edita Hispalyt, les sirven de referencia.