SECCIÓN TÉCNICA STRUCTURA. Razón de ser del sistema Structura (3ª parte)
Artículo de la arquitecto Concepción del Río
Con objeto de dar una idea de las proporciones de paños a los que se puede llegar, aplicando el método de las líneas de rotura sancionado por el DB SE-F, en cerramientos autoportantes de medio pie de ladrillo, se presenta en la siguiente tabla (ver las dos imágenes) las soluciones tabuladas para los valores habituales de resistencia de fábricas de ladrillo cerámico perforado, con junta de mortero ordinario y con una cuantía media de armadura de tendel. Las soluciones tabuladas permiten deducir, a simple vista, la influencia que tienen los parámetros geométricos y la presencia de carga gravitatoria en la viabilidad y economía de la solución constructiva.
Para reducir el número de las variables de la tabla, se han considerado los valores pésimos, tanto para la obtención de solicitaciones (máxima presión de viento deducida de la aplicación del DB SE-AE), como para determinar la capacidad resistente (mínima resistencia a compresión y flexión de la fábrica deducidas de las tablas 4.4 y 4.6 del DB SE-F), de forma que se puedan aplicar, a favor de la seguridad, en cualquier caso sin restringir su generalidad.
Debido a que la condición de sustentación del borde superior es fundamental en los resultados del análisis, en la tabla se destacan los valores que corresponden a la última planta (sin continuidad en cabeza). También conviene indicar que, aunque en las tablas aparece la notación de “altura máxima de planta de arranque”, los valores de la tabla sirven para comprobar cualquier planta tipo intermedia, cuya cota medida desde la coronación sea la indicada en la cabecera.
La principal conclusión, fundamental para el proyectista en la fase de diseño, que se puede extraer de la tabla adjunta, es que las verdaderas variables que condicionan el dimensionado frente a acción horizontal son de tipo geométrico. En términos cuantitativos, y refiriéndonos a un paño tipo con ladrillo perforado de formato castellano, la última planta con altura típica de vivienda (en torno a 2,70 m) necesita una cuantía media de armadura a partir de luces medias (5,00 m); mientras que la penúltima sólo necesitaría una cuantía mínima; y el resto se podría resolver sin armadura, con luces de paños de 6,00 m. Si se utiliza formato catalán los rangos viables de luces y alturas son mayores.
Para luces modestas (en torno a 4,50 m) el paño de la penúltima planta y todos los inferiores pueden adquirir alturas notoriamente elevadas, lo que permite utilizar esta solución constructiva en situaciones singulares, como puede ser revestimiento de túneles u obras de rehabilitación, sin forjados aparentes en el plano de fachada.