Luis de Garrido, doctor arquitecto y presidente de la Asociación Nacional para la Arquitectura Sostenible (ANAS)

“La moda de la arquitectura sostenible ha pasado sin que se haya hecho casi ningún edificio sostenible”

Luis de Garrido es doctor arquitecto y presidente de la Asociación Nacional para la Arquitectura Sostenible (ANAS), y de la Asociación Nacional para la Vivienda del Futuro (ANAVIF). Desde su posición de experto opina sobre el grado de sostenibilidad que se alcanza en la construcción española.

La sostenibilidad y la ecología son temas que en los últimos años se han extendido a casi todos los sectores de la actividad productiva y económica, pero quizás falta concreción en el ámbito de la construcción. Así, ¿en qué consiste la arquitectura sostenible, o la vivienda sostenible?
La sostenibilidad se ha extendido rápidamente en todos los estamentos de nuestra sociedad por dos motivos. Uno por la necesidad y el otro por una cuestión puramente mediática. Científicos y ecologistas han alertado sobre el desequilibrio ecológico del planeta, y el público se ha sensibilizado y reclama acciones inmediatas. Diferentes empresas y la Administración han quedado en evidencia ante las reclamaciones de parte de la sociedad ya que la respuesta es esencialmente mediática y sin contenido real.
Esta situación confunde al consumidor, y lo peor de todo es que perjudica a aquellos profesionales y empresas que, por voluntad propia, desean mejorar en todos los sentidos, incluyendo los aspectos medioambientales. Este podría ser el caso de las empresas fabricantes de nuevos materiales más ecológicos, como es el caso de la Termoarcilla, u otros elementos de construcción basados en la arcilla cocida.
Una auténtica arquitectura sostenible es aquella que garantiza el bienestar de todos sus ocupantes, perjudicando lo menos posible el bienestar del resto de la sociedad, del resto de los seres vivos y del planeta en general; tanto en la actualidad, como en las generaciones venideras.

¿Cree que existe un cambio de hábito en la demanda arquitectónica que prioriza el diseño sostenible por encima de otros valores?
El promotor se ha dado cuenta de que la “sostenibilidad” vende y por ello, simplemente, ha reforzado los medios convencionales para vender.  Pero lo que sigue haciendo se limita, como siempre, a cumplir -por los pelos- con la normativa vigente. Lo que ocurre es que ahora tiene como cómplice a la Administración, que está en el mismo tren. El Código Técnico de la Edificación (CTE) se ha vendido como “sostenible”, aún cuando no tiene nada para serlo, ni originalmente se gestionó como tal. Sus objetivos respecto de la sostenibilidad se centraban tan solo en intentar reducir un poco el consumo energético. Así, para el promotor es perfecto: cumplimos como siempre –o no– con la normativa vigente, “y ya somos sostenibles”. El CTE ha sido como un peine para un calvo, se aprobó cuando ya no se construía. Actualmente solo se está construyendo lo que se proyecto muchos años antes de que entrara en vigor. Como consecuencia, la moda de la arquitectura sostenible ha pasado sin que se haya hecho casi ningún edificio sostenible.

Antes, durante y después de la desaceleración en el sector de la construcción…  ¿La sostenibilidad es un valor real o una pura herramienta de marketing?
En la gran mayoría de los casos es solo una herramienta de “propaganda”. La gente de la calle no puede reclamar edificios ecológicos, ya que, en general, no sabe lo que son, ni su viabilidad. La gente de la calle solo obtiene información por los medios de comunicación, el boca-a-boca, y sobre todo, por Internet, que es un arma tan poderosa como peligrosa, ya que la información no está contrastada. Uno encuentra con el mismo esfuerzo una información de vital importancia escrita por un experto (que ha investigado y experimentado toda su vida, esforzándose por mejorar las cosas y preocupado por los demás), al lado de una soberana bellaquería escrita por un oportunista. Y el problema es que si la página web del oportunista es más atractiva, puede convencer al lector que no tiene herramientas para contrastar la información. Por tanto, se necesitan muchas más publicaciones. Más libros, más revistas, más conferencias, pero sobre todo, más edificios sostenibles terminados.

¿Cómo se está desarrollando la sostenibilidad en España en comparación con sus vecinos europeos? ¿Qué papel juegan las Administraciones Públicas en la divulgación de una arquitectura sostenible?
Nuestros vecinos europeos, sobre todo alemanes e italianos, construyen menos y mejor. Precisamente, la sostenibilidad necesita experimentación, y monitorización, por lo que la premura de tiempo siempre es mal aliada. Como consecuencia, apenas podría poner dos o tres ejemplos de edificios sostenibles españoles, y podría citar más de cien ejemplos en Alemania, Austria, Francia o Italia. Una economía como la española basada en el ladrillo, una “picardía” como la española, y la enorme infraestructura mediática conseguida en este país, explican perfectamente cuál es nuestra situación.
Con respecto a la administración, puedo resumir su papel: siempre llega tarde, mal o nunca. El CTE es un buen ejemplo. Pienso que la administración debería ser una herramienta ágil y dinámica para incentivar la acción privada, canalizarla, facilitarla y corregirla, pero no lo es.

Ha comentado que sería bueno que se modificase el CTE para conseguir otro más sencillo, más comprometido, eficaz y adecuado. ¿Por qué es necesario ese cambio?
Para contestar a este apartado me gustaría hacer otra pregunta. ¿Cuántas normativas están en vigor para todo el sector de la construcción en España? En total existen unas siete mil normativas que regulan el sector de la construcción de forma directa o indirecta. ¿Cuáles se cumplen? Muy pocas.
Imagínese, siete mil normativas. ¿Cuánto tiempo se necesita para conocerlas todas? ¿Cuánto tiempo se necesita para conocer las mas importantes? ¿Cuánto tiempo dispone un arquitecto para leerlas y estudiarlas? Y el promotor, ¿cuánto tiempo le dedica? Y no me canso de decir que en muchos aspectos energéticos, el anterior CT-79 era bastante mejor que el actual CTE. El CTE no supone mejora alguna en muchos aspectos y crea muchísimos más problemas de los que pretende resolver. Es tan complejo, laberíntico, deficitario, contradictorio y erróneo, que los arquitectos lo hemos tomado como un impuesto revolucionario. El resultado es que  antes debíamos incluir cincuenta páginas de memorias en un proyecto, y ahora incluimos doscientas. No tardaremos en darnos cuenta que el cumplimiento del CTE no afectará en modo alguno al nivel de sostenibilidad de nuestros edificios. Los edificios siguen siendo los mismos. Al final, todo seguirá dependiendo de la buena voluntad de cada uno de los promotores, constructores y arquitectos, como siempre ha pasado.
Para mejorar la situación estimo que lo primero que debe hacerse es eliminar miles de normativas, así como simplificar su ejecución y su puesta en práctica. Y por supuesto, que la normativa sea válida. De este modo, disminuyendo el número de normativas (haciéndolas más eficaces y mas sencillas), eliminando las normativas regionales y disponiendo algún tipo de control, sin duda, se edificaría mucho mejor.

¿Qué importancia juegan los materiales cerámicos en la sostenibilidad de la construcción?
La cerámica, en general, es un material muy bueno desde el punto de vista sostenible. Su fabricación tiene un alto grado de optimización de los recursos necesarios, a la vez que tiene un bajo nivel de consumo energético (alrededor de 8 mJ/kg, comparados con unos 80 mJ/kg de algunos plásticos, o 220 mJ/kg. del aluminio). Asimismo, además de su coste reducido y de la baja necesidad de mantenimiento, la producción tiene bajo control las emisiones y residuos producidos y no pone en peligro la salud y el bienestar humano.
Es cierto que la industria de la cerámica aún debe mejorar más medioambientalmente, eliminando aditivos peligrosos, y disminuyendo las emisiones y residuos, y también desde un punto de vista funcional (creando nuevos productos, nuevos formatos y nuevas aplicaciones), pero puede decirse que, actualmente, es uno de los mejores productos disponibles.