El peldaño mallorquín de Barro Cocido. Recuperación del elemento arquitectónico de antaño

Desde hace varios siglos, en Mallorca se ha venido fabricando el “peldaño cerámico de metro” un elemento artesanal, único y típico en las escaleras de esta isla desde antaño. Este elemento que sigue siendo muy utilizado actualmente en obras rústicas, pero también en interiores de moderno diseño y con formatos superiores al clásico de metro.

Esta pieza cerámica de gran carácter, se elabora no sin gran complejidad por su tamaño de hasta 140 x 40 cm, -lo cual dificulta enormemente los procesos de fabricación-, a base de arcilla amasada y moldeada, que una vez bien seca, es cocida a temperaturas por encima de los 1.000 ºC en hornos clásicos, que utilizan hoy gas natural, para una mejor calidad de producto y mejora ambiental.

El formato típico mallorquín ha sido durante mucho tiempo la pieza de metro de ancho, con treinta  centímetros de huella; si bien ha evolucionado en dimensiones, desde que reinició su producción hace más de veinticinco años la empresa Ladrillerías Mallorquinas, de Felanitx, la cual en su planta de producción artesanal, adaptó sus instalaciones para poder producir este producto.

Los técnicos y artesanos de Ladrillerías Mallorquinas recuperaron las antiguas maneras de producción de esta típica pieza y las adaptaron a las nuevas necesidades de demanda del mercado mediante una producción suficiente y de calidad, ello sin dejar de lado su carácter totalmente artesanal, dando así, suministro suficiente al mercado, en cantidad, más formatos y buena calidad.

El formato del peldaño ha ido creciendo hasta llegar a los 140 cm, con huellas de 30, 35 y 40 cm, y acabados a medida en la mayoría de los casos, pues se sirven a diario según las necesidades técnicas de cada obra.

También se recuperó el “primer peldaño” de entrada a la escalera con el lateral curvado y realizado a mano a la medida solicitada por el cliente. Es un elemento típico de las casas mallorquinas antiguas.

Una de las mejoras introducidas en el producto fue la adopción de las “colas de milano” en su parte inferior, las cuales permiten el correcto agarre de la pieza al mortero, y otra mejora fue la realización del bocell lateral (a derecha o a izquierda) La mayoría de peldaños se sirven desde fábrica cortados a medida según las exigencias de cada obra.

Los peldaños de barro cocido pueden ser, posteriormente a su colocación y secado de la obra, tratados con ceras y aceites específicos, los cuales les dan un aspecto decorativo aún más antiguo y realzan su acabado en los interiores de las viviendas.

Más información: www.ladrillerias.es